Hacer cumplir la Ley.
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La falta de carácter del Presidente (o lo que sea) Zapatero está empezando a pasarse de castaño oscuro. A este paso se le van a subir a las barbas (y eso que no las tiene) hasta los herederos de Chindasvinto. De momento, han empezado alcaldes del P.P. presuntos delincuentes (algunos ya convictos) a declararse poco menos que presos políticos y también un buen puñado de Guardias Civiles de uniforme. Independientemente de que yo simpatice con sus reivindicaciones, sobre todo con su "civilización", reconozco que lo primero es empurarles de acuerdo con la Ley en vigor y después ya veremos.
Luego está también la aplicación de la Ley a los "intocables" del P.P. que se creen por encima de ella y así lo exigen constante e impúdicamente, en lugar de asumir responsabilidades y expulsar a los delincuentes que van proliferando a pasos agigantados entre sus filas.
Y no hacerlo así, está empezando a traer unas consecuencias nefastas a un gobierno que, gobernando razonablemente bien, como lo está haciendo (en general y a grandes rasgos, más allá de errores o lapsus semánticos), está perdiendo todas las batallas que cualquier persona o colectivo oportunista tenga a bien plantearle, por falta de firmeza y de carácter (como he comenzado diciendo).
También me parece inconcebible cómo manipula el P.P. la Ley a su antojo y cómo insulta personalmente, sobre todo a Zapatero, pero ahora mismo, me parece mucho más inaudito cómo Zapatero se deja insultar y zarandear sin un ápice de dignidad ni de agallas.
Como no me va a hacer ni puñetero caso, me puedo permitir el lujo de decirle a Zapatero lo que, a mi juicio, debe hacer. Lo primero que yo haría sería defenestrar (estatutariamente, por supuesto) a Pepino por incompetente y atontado y elegiría en su lugar a alguien con un par de ellos bien puestos que, educadamente pero con contundencia y con datos, saliera bien al paso de todas las maniobras, algo parecido a lo que hace la Vicepresidenta en el Gobierno, aunque, por cierto, últimamente parece bastante cansada o frenada.
Después, pondría a trabajar al Fiscal General del Estado y a la Abogacía del Estado para que (como ocurre con Batasuna y sus organizaciones juveniles) se hiciera cumplir la Ley de un Estado de Derecho que no puede dejar impunes insultos, ofensas personales a sus representantes políticos, calumnias y todo tipo de delitos por parte de los sectores matoniles y delincuentes (algunos presuntos, otros ya convictos) del P.P.
Eso empezaría a devolvernos a los ciudadanos la sensación de que el Estado funciona, de que la democracia se fortalece y de que la Ley se cumple por parte del Ejecutivo, otra cosa es que la empiece a cumplir el Poder Judicial y los jueces (mayoritariamente conservadores) en general, pero si no lo hicieran, quedarían más desprestigiados y más al descubierto y sería su problema (aparte de que hay medios legales de hacerles cumplir la Ley).
Otra cosa que haría, es salir a los medios de comunicación para dar a conocer un plan del Gobierno que siente las bases para desarrollar una ofensiva tanto contra la amenaza terrorista de ETA como contra la amenaza antidemocrática venga de donde venga.
Eso nos daría a los ciudadanos la necesaria sensación de que nuestra joven democracia se fortalece y se endurece frente a todo tipo de ataques y de que no basta la estabilidad económica y social, sino que todos los enemigos de España van a tener en frente a un Gobierno y a un Presidente a los que no les tiembla nada en la defensa de los intereses ciudadanos y en el cumplimiento estricto de la Democracia y de la Ley.
Todo lo demás, es consentir y dejar que te sieguen la hierba bajo los pies o que te hagan la cama. Y eso, además de tener nombres muy feos, se termina pagando absurdamente caro.
Javier Auserd.
4 comentarios
Dinosaurio -
olvidare el ayer... -
un abrazo con cariño,amigo.
Trini -
Un abrazo
Hannah -
Un fuerte abrazo.
Hannah