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La cueva del dinosaurio

Trabajadores colaterales.

Trabajadores colaterales.

No sabían qué era ETA, no se la habían presentado. ¿Tal vez un equipo de basket? ¡Ojalá!
Ellos habían venido a trabajar para sacar adelante a su familia de allá, sumida en la miseria más atroz. Trabajaban los siete días de la semana. Ellos, tan católicos, sin poder respetar siquiera los usos de la jerarquía a la que veneran. Porque es el hambre el que impone, en realidad, las costumbres.
Y ahora, que han muerto dos inmigrantes asesinados por ese "equipo de basket", que me diga cualquier dirigente, militante clandestino o "simpaticorro" y extrovertido simpatizante de Batasuna, que me diga: ¿es esa vuestra ideología?, ¿ser partidarios de asesinar trabajadores, trabajadores inmigrantes, trabajadores españoles, trabajadores vascos?, ¿a partir de qué generación consideráis como "vascos"?, ¿sois partidarios de asesinar inmigrantes, o pueden trabajar allí y aquí, aunque sea como "esclavos"?, ¿asesinar a esos componentes de "fuerzas de ocupación" que protegen vuestro patrimonio y vuestro poder adquisitivo, el más alto de España y casi de Europa?, ¿asesinar a políticos, alcaldes, periodistas, catedráticos, artistas, escritores?, ¿permitís la libertad de expresión ajena, o sólo la propia?, ¿asesinar "cosas", "daños colaterales" (como alguien acaba de decir abiertamente), como Bush?, ¿quemar "casas del pueblo", cajeros, autobuses? ¿Esa es vuestra ideología? ¿Esa es vuestra idea de independencia? ¿Ese es el Estado que decís aspirar a crear? Pues a mí no me gustaría jamás vivir en un "Estado" así, ni regalado, porque sólo hay un "Estado" que me recuerde esos métodos: el Estado nazi.
A los curas de ETA, contratadores de lumpen-asesinos, no se les puede decir nada, porque van a seguir haciendo lo que quieran unos repugnantes gusanos que defienden su negocio de muerte y de crimen organizado a sangre y fuego sin el menor remordimiento o que, si lo tienen, se lo limpian enseguida con "agua bendita" ensangrentada. A la cúpula dirigente PPtarra, tampoco la digo nada porque tampoco va a cambiar hasta que vuelvan a ocupar el poder y les interese personalmente. Pero a esos simpatizantes, militantes, dirigentes de Batasuna, sí les digo: ¿de verdad os parece éticamente admisible justificar las atrocidades de ETA?, ¿de qué sois esclavos y por qué?, ¿también vosotros vivís de ese negocio?, ¿de verdad creéis que así se consigue un Estado independiente?, ¿y formaríais luego con esos mismos ejecutores asesinos una Policía, una Justicia, un Ejército, una Administración? No cabe duda de que si el franquismo y regímenes similares pudieron hacerlo, vosotros también podríais, pero ya hemos vivido 40 años en un "Estado" así, sabemos lo que es y significa y no queremos vivir nunca más en un territorio semejante.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, ni peor sordo que el que no quiere oir (con todos mis respetos para ambos colectivos), por eso hace mucho que he renunciado a entender a ETA y a la cúpula del P.P. porque me parecen incompatibles con la verdad, la razón y la vida, pero se me sigue haciendo muy cuesta arriba que vosotros y los simpatizantes y votantes del P.P. continuéis justificando lo injustificable.
¿Sabéis lo que os digo?, que si yo fuera vasco me iba de Euskadi para no mancharme con "ideologías" antihumanas tales, como ya hacen miles y miles de vascos que viven libre, pacífica y respetablemente fuera de Euskadi. Sólo espero que nunca consiga ese engendro criminal de muerte y destrucción llamado ETA (y quienes lo manejan y quienes lo consienten) sus peores propósitos por el bien de la decencia mental, de la limpieza democrática y de la propia vida.
Vinieron a trabajar para poder vivir y han encontrado la muerte más absurda. A Diego, a Carlos y a sus familias, les pido perdón en nombre de la humanidad, de España y de sus asesinos, ya que ellos no tienen el valor de hacerlo. Eso, por desgracia, no les devuelve la vida y la salud para poder seguir trabajando para mantener a los suyos, pero a cualquier ser humano y a cualquier pueblo, le devuelve unos gramos de dignidad, aunque no den siquiera para no sentirnos salpicados.

 

Javier Auserd.

3 comentarios

Dinosaurio -

Gracias por vuestra visita. Es que, como vosotras mismas sabéis y no os cansáis de decir, ya tocan mucho las narices, ¡hombre!
Abrazos.

Hannah -

¡Amén!, amigo; ¡Amén en todo!.
Un abrazo entrañable
Hannah

Zuriñe -

si, estamos muy cansados todos de este monstruo. Como yo he dicho, está dando los últimos coletazos y todavía se quiere llevar por delante a unos cuantos. Ya basta o basta, ya que lo mismo da.